MARTA GRACIA BLANCO
¿Os acordáis, mis queridos inexistentes lectores, del duelo de espadas de Kill Bill?
Pensaba ahora, por razones que no vienen al caso, que las palabras son como las espadas del samurai. Hay que tener cuidado al emplearlas porque cortan. Y en un duelo de palabras, nadie sale indemne. Pero suele vencer el que sabe emplearlas mejor.
4 comentarios:
Voy a abandonar mi inexistencia por un momento para dejar aquí un modesto y breve comentario a propósito de las palabras.
Con pulso firme, el asesino moja su fina pluma en la sangre de su víctima, y con elegante caligrafía escribe la palabra Amor.
Creo adivinar cuales son las "razones que no vienen al caso", y pienso que estaría de acuerdo contigo. O tal vez no, quién sabe.
Salud
Necesito leerte con más profundidad para comentarte.
Algunas palabras como cicatrices no se borran.
Un saludo
Así es Pili, las palabras a veces duelen y hieren, hay que usarlas con precaución, pues a veces son peores que los filos de esas espadas. Un fuerte abrazo y buen fin de semana. @Pepe_Lasala
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